Este martes Rusia y Egipto abrían el telón de la segunda jornada de fases de grupos. Los rusos, tras vencer por goleada a Arabia Saudí por cinco goles a cero debían enfrentar al equipo de Mohamed Salah, un combinado de Egipto que llegaba con la obligación de puntuar si quería mantener opciones de clasificar.

Rusia, imparable

Líder de grupo e invictos, así marcha Rusia en el Mundial de Fútbol del cual son anfitriones. Los rusos dominaron categóricamente a Arabia Saudita el pasado jueves 14 de junio en el que representó el juego inaugural de Rusia 2018.

Este martes los anfitriones tenían una tarea un poco más difícil que la anterior ya que la selección de Egipto en el papel representaba mayor peligro. Sin embargo los locales desplegaron un gran fútbol y supieron vencer sin mayor problema a la selección arábica.

El partido se jugó en el estadio Krestovski ubicado en la ciudad de San Petersburgo. Rusia siempre tuvo ventaja en el marcador, inclusive llegó a estar arriba tres goles por cero. El primer tanto de los locales llegó gracias a un error del capitán egipcio Ahmed Fathy, el jugador intentando despejar un balón en el área chica anotó un gol en su propia puerta, esto ocurriría al minuto 47’. Los otros dos goles de los rusos fueron de Denis Cheryshev (59’) y Artiom Dziuba (62’).

El descuento de Egipcio fue marcado por el jugador estrella del Liverpool y una de las máximas figuras de esta Copa del Mundo, Mohamed Salah, al minuto 73’. Con esta victoria Rusia suma seis puntos y es líder de grupo.

Si Uruguay no pierde con Arabia, Rusia a octavos

Un resultado favorable para los rusos sería una victoria uruguaya ante la selección de Arabia Saudita.

Esto sin duda dejaría a los arábicos sin opciones matemáticas y clasificaría automáticamente tanto a Uruguay como a Rusia.

Los rusos están virtualmente clasificados a octavos de final. Solo una catástrofe podría evitarlo. Suman un total de seis puntos con 8 goles a favor y uno solo en contra, lo que les permite tener un diferencial de goles muy favorables de +7.

Luce casi imposible que los anfitriones se queden fuera de la siguiente ronda.

Uruguay está obligada a derrotar al conjunto árabe por obvias razones, en primer lugar para no complicarse su clasificación a la siguiente fase y en segundo lugar para clasificar matemáticamente apenas en la segunda jornada de fase de grupos. Todo apunta a que el destino del grupo A ya está más que decidido.